La Fiscalía se inclina por solicitar prisión inmediata para los octogenarios Millet, Osácar, Montull y su hija
La Fiscalía Anticorrupción se inclina por solicitar prisión inmediata para el expresidente del Palau de la Música, Félix Millet; el exdirector Financiero del Palau, Jordi Montull; el extesorero de CDC, Daniel Osácar; y la exdirectora Financiera del Palau, Gemma Montull, tras la sentencia del caso Palau.
Este lunes, la Audiencia Provincial de Barcelona ha condenado a 9 años y 8 meses de cárcel a Félix Millet, a 7 años y medio a Jordi Montull, a 4 años y medio a su hija Gema Montull y a 4 años y 5 meses a Daniel Osácar. La sentencia de 549 páginas condena también al partido CDC, actual PDeCAT, a devolver 6,6 millones de euros, por financiarse a través de comisiones ilegales derivadas del Palau.
En los próximos días, previsiblemente se celebrará una vista en la Audiencia Provincial de Barcelona donde se decidirá sobre las medidas cautelares. Es decir, si los condenados deben ingresar en prisión inmediatamente o si bien, pueden permanecer en libertad provisional con cargos a la espera de que la sentencia sea firme, tras la probable presentación de recursos de casación ante el Tribunal Supremo.
Según las fuentes consultadas por OKDIARIO, la intención de la Fiscalía es solicitar ya el ingreso en prisión para Félix Millet, Jordi Montull, Daniel Osácar y Gemma Montull, «sin esperar a la tramitación de los recursos de casación ante el Tribunal Supremo» por la gravedad de las penas.
Cabe destacar que los cuatro condenados nunca llegaron a ser encarcelados preventivamente por este caso durante la instrucción. Millet y Montull tienen el pasaporte retirado y la obligación de comparecer mensualmente en el Juzgado desde octubre de 2009, cuando prestaron declaración ante el juez instructor Juli Solaz.
El magistrado dejó en libertad a Gemma Montull sin imponerle ninguna medida cautelar, pero la Audiencia de Barcelona rectificó posteriormente y le fijó una fianza de 500.000 euros, además de la retirada del pasaporte y la obligación de comparecer semanalmente. Por su parte, el extesorero de CDC declaró en 2011 como investigado ante el juez instructor, sin que la Fiscalía, ni ninguna de las acusaciones solicitara medida cautelar alguna para él.
Otras fuentes señalan que aunque la Fiscalía solicite la prisión para los cuatro, «existen pocas posibilidades de que la Audiencia Provincial de Barcelona acceda a esta petición, ya que durante la instrucción, cuando existía mayor riesgo de destrucción de pruebas o de fuga, no se ordenó su ingreso». A esta razón habría que añadir la avanzada edad de algunos de los condenados. Félix Millet tiene 82 años y va en silla de ruedas, por lo que resulta «poco probable que sea encarcelados antes de la que sentencia sea firme».
Normalmente, en el caso de los condenados en firme por encima de los 70 años, se suele imponer un régimen de tercer grado tras su ingreso para que los reos no estén en la cárcel.
En este caso, los cuatro penados serían todavía presos preventivos, a la espera del Supremo, por lo que si la Audiencia de Barcelona lo dictaminara ingresarían en prisión. No obstante, los presos de mayor edad irían posiblemente a la enfermería y no junto al resto de presos. Además, podrían presentar incluso informes médicos que desaconsejaran su encarcelamiento.
Tras conocerse la sentencia, la Fiscalía Anticorrupción emitía un escrito indicando que “desea manifestar su satisfacción con la sentencia hecha pública hoy por la Audiencia Provincial de Barcelona acerca del llamado ‘caso Palau”’”.
“La sentencia», añadía el comunicado, «acoge las principales tesis planteadas por el Ministerio Público en el transcurso de la vista oral, y atiende las peticiones de resarcimiento expuestas en su escrito de conclusiones. Asimismo, y a la vista de las elevadas penas impuestas por el tribunal, la Fiscalía solicitará la celebración de una comparecencia de los condenados Félix Millet, Jordi Montull, Daniel Osácar y Gemma Montull, para solicitar las medidas sobre situación personal que estime oportunas».
Mientras tanto, algunos de los condenados ya han anunciado oficialmente su intención de recurrir la sentencia ante el Tribunal Supremo. Éste es el caso de Jordi Montull, su hija Gemma Montull o de la propia Convergencia Democrática, CDC.
La sentencia del caso
Según el fallo judicial, el entramado puesto en marcha por Félix Millet, Jordi Montull y Gema Montull permitió el destino ilegal de más de 23 millones de euros y el desvío para fines privados (obras en domicilios particulares, viajes privados, financiación de enlaces matrimoniales, compra de bienes) de cantidades millonarias.
También el pago de comisiones a una formación política, Convergencia Democrática de Cataluña, el pago de facturas por servicios no prestados, la presentación de recibos por pagos no correspondientes, así como el correspondiente fraude a Hacienda por la liquidación irregular de los movimientos de dinero que o no eran reales o no correspondían a la explicación que los justificaba, ingresos y donaciones que ocultaban el verdadero origen y finalidad del dinero.
La sentencia explica que Millet y Montull, contando desde diciembre de 2003 con la indispensable contribución de Gemma Montull, “pusieron en práctica una estrategia encaminada a disponer, ilícitamente, de cuantiosos fondos de ASSOCIACIÓ, FUNDACIÓ y CONSORCI, para aplicarlos, bien a gastos particulares de ellos o sus familias, bien a fines desconocidos, pero en todo caso ajenos por completo a los fines e intereses propios de los entes a los que dichos fondos pertenecían”.